Esta vez fueron menos personas a los cementerios locales para recordar a sus seres queridos que permanecen en sus tumbas.
Por: El Mañana de Reynosa
Más de 1,000 personas acudieron al panteón municipal “Sagrado Corazón de Jesús” el domingo, fecha en la que se celebró el Día del Padre.
Las familias aprovecharon la ocasión para ir a visitar a sus papás que dejaron el mundo terrenal y cuyos restos descansan en una de las numerosas tumbas que existen en ese lugar.
Además de arreglar sus sepulturas, también se dieron a la tarea de recordar algunas de las canciones que le gustaban a sus papás en vida, con la intervención de uno de los duetos musicales que cantaron y tocaron para los homenajeados.
A decir de uno de los empleados del cementerio, al menos mil personas habían ingresado al camposanto hasta las 14:00 horas, esperando que llegara más gente durante lo que restaba del domingo.
Comentó que cuando se llevó a cabo la celebración del Día de la Madre, el pasado 10 de mayo, el número de visitantes fue mucho mayor, fecha en la que la calle interior se vio plagada de gente, así como también de vehículos.
La gente entró en esa ocasión con arreglos florales en mano, pero esta vez fue menos gente, pero todos acudieron con el fin de rendirle un reconocimiento así como para recordar a los padres que ya no están con ellos porque partieron al más allá.
Otros panteones municipales más, así como particulares, también registraron buena afluencia.
SUBEN VENTAS DE LAS FLORES
Aumentaron las ventas de flores entre un 15 y más por ciento en varios negocios instalados en el Mercado de la Flor por motivo del Día del Padre.
“Nosotros, en lo personal, tuvimos un movimiento comercial que podría considerarse como bueno, al menos hasta las 13:00 horas de hoy”, dijo Emma Vélez, una de las floristas del lugar.
Todavía esperaban más ventas, porque mientras unos compraban arreglos florales para sus papás, otros llegaban para también obtener esa clase de mercancía pero para llevarlas a las tumbas de sus progenitores.
Hubo hasta algunos que compraron coronas para ir a depositarlas adonde descansan los restos de sus respectivos papás, en tanto que otros las llevaron a sus hogares, donde celebrarían el Día del Padre o a algún restaurante de la ciudad, señaló Emma Vélez, quien dijo que fue en horas de la mañana del domingo cuando su negocio prácticamente se vació tras las compras realizadas por la gente.
